Condición resolutoria

La condición resolutoria es una facultad que tienen los firmantes de los contratos para pedir que se cumpla con lo pactado ante un juez o solicitar que el contrato en cuestión se dé por resuelto.

Condición resolutoria

La condición resolutoria es una resolución que tiene por objetivo dejar sin efecto un contrato cuando alguna de las partes no cumple con lo estipulado.

Esto está estipulado en el artículo 1.546 del Código Civil (CC) de Colombia y es una garantía de la que disponen las partes afectadas en un caso de incumplimiento contractual. De esta manera, pueden hacer valer sus derechos y proteger sus intereses.

En los contratos bilaterales va envuelta la condición resolutoria en caso de no cumplirse por uno de los contratantes lo pactado.

Pero en tal caso podrá el otro contratante pedir a su arbitrio, o la resolución o el cumplimiento del contrato con indemnización de perjuicios.

Artículo 1546 del Código Civil de Colombia

¿Qué se puede solicitar a través de una condición resolutoria?

Esta facultad habilita a la persona que presenta la demanda a exigir tres cosas ante un juez o tribunal:

  • El cumplimiento parcial o total de un contrato que ha sido incumplido.
  • La cancelación del contrato.
  • Una indemnización por los perjuicios derivados del incumplimiento de lo establecido contractualmente. Esto puede solicitarse en combinación con cualquiera de los dos elementos anteriores.

Requisitos para solicitar una condición resolutoria

Según ha indicado la Corte Suprema de Justicia en un fallo, la parte que reclama por esta vía tiene que estar limpia de toda culpa. Es decir, que debe haber cumplido con las obligaciones estipuladas en el contrato de manera rigurosa.

Además, según el máximo tribunal, “la legitimación para solicitar el aniquilamiento de la convención surge del cumplimiento en el actor y del incumplimiento en el demandado u opositor”.

El derecho de terminación sustenta los pedidos de condición resolutoria

En el ámbito legal colombiano se considera que el derecho de terminación de un contrato nace de las cláusulas resolutorias expresas. Ahora bien, como la inserción de las mismas es irregular, la interpretación de las mismas es de carácter tácito. En otras palabras, los contratos deben cumplirse, y de no ser así, la parte perjudicada tiene derecho a reclamar por sus derechos.

En estos casos, es vital la intervención de un juez para declarar la infracción convencional. Además, es potestad del magistrado definir la gravedad del incumplimiento, la posible existencia de eximentes de responsabilidad o el procedimiento de resolución del convenio.

Un contrato no puede darse por terminado sin la intervención de un juez

Para que una parte pueda dar por finalizado un contrato con base en el mencionado artículo 1.546 del Código Civil es necesario que acuda al juez o tribunal correspondiente por jurisdicción, pruebe el incumplimiento y pida la resolución.

En el caso de que el contrato finalice de manera unilateral, sin decisión judicial de por medio, se está cometiendo una falta que compromete la responsabilidad de la parte en cuestión.

Idealmente los contratos deben estipular el procedimiento ante una falta

Cuando en un contrato existe un vacío este no puede ser llenado por un juez. Por lo tanto, la mejor manera de garantizar el derecho de terminación es un diseño correcto del contrato que incluya los parámetros objetivos de medición del incumplimiento de las cláusulas del mismo.