La doctrina es el conjunto de estudios y criterios académicos que se consideran permitidos en materia jurídica. La finalidad es el propósito de describir, simplificar y aportar soluciones viables dentro del ámbito legal.

La doctrina es la base del ordenamiento jurídico de un Estado y se forma a partir de la opinión de expertos juristas y estudiosos del Derecho
De hecho, estas disposiciones son tomadas en cuenta por los expertos en el campo del derecho para interpretar y aplicar el marco jurídico. Lo cual se sustenta en la investigación, el análisis y la reflexión profunda de la legislación vigente.
En otras palabras, la doctrina representa aquellos estudios de carácter científico que realizan los expertos en materia de derecho. Para contribuir a la evolución del sistema legal, con el aporte de nuevos enfoques o interpretaciones.
Vínculo de la doctrina con el marco legal
El vínculo entre la doctrina y el marco legal, se sustenta en las siguientes funciones:
- Describir: mostrar las diferentes disposiciones legales de forma ordenada y coherente. Todo ello permite tener una mayor precisión de los fundamentos normativos jurídicos.
- Explicar: hacer entendible las disposiciones del marco normativo con la finalidad de ofrecer una visión más clara. Es decir, la doctrina pretende que los criterios legales sean más claros y tangibles.
- Sistematizar: ordenar en función de los rasgos de cada aspecto del marco legal. De este modo, a cada criterio se le coloca un contexto adecuado y una interconexión.
- Criticar y aportar: demostrar deficiencias en el marco jurídico y establecer posibles soluciones prácticas. Lo cual quiere decir que la doctrina aporta soporte científico para fortalecer la estructura normativa legal.
Doctrina como una fuente del derecho
Las fuentes del derecho formales son las instrucciones a través de las cuales las normas adquieren un rasgo válido y obligatorio dentro del derecho. En este caso, la doctrina trata de analizar las diferentes posiciones que existen en relación con un asunto en particular. De esta forma, la doctrina permite aclarar conceptos legales y contribuir al desarrollo del derecho.
Bajo esta perspectiva, la doctrina no se establece como una fuente formal del derecho. Pero puede ser manejada como referencia para la interpretación y aplicación de las normas.
Actuación de la doctrina en el derecho
Se puede decir que la doctrina forma parte de las fuentes del conocimiento del derecho y de esta manera ejerce cierta influencia en las normas. Donde su aplicación ayuda a simplificar elementos que acrediten la objetividad y el desarrollo de los argumentos de los juristas.
Esta importante base a tomar en cuenta en determinadas decisiones, la doctrina, promueve un pensamiento jurídico más profundo y el progreso continuo del derecho. En otras palabras, la influencia de algunos juristas de prestigio ejerce soporte en la formulación de alegatos.
Por esta razón, la doctrina proporciona criterios y soluciones prácticas a los expertos en materia legal. Con el propósito de tomar decisiones informadas y coherentes bajo el marco normativo jurídico.
También se manifiesta un carácter persuasivo y un impacto significativo en la interpretación de las leyes. Lo cual cobra más fuerza cuando existe un consenso entre los expertos y sus argumentos son sólidos.