En Chile, si la víctima no cumple con la orden de alejamiento y permite el acercamiento del victimario, igualmente se estará incurriendo en desacato a la orden de los tribunales, por lo que el agresor deberá enfrentar las sanciones pertinentes.
Las penas pueden ser medidas privativas de libertad, de entre seis meses a un año, o multas.
En caso de que la víctima quiera anular la orden de alejamiento, puede solicitarlo ante el tribunal de justicia, siempre que la orden sea una medida cautelar y no una sentencia firme del tribunal, en la que el acusado deberá acatar esa orden hasta que se cumpla el tiempo establecido en ella.
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